Lo que regresa y lo que se va...

Hace años, comprando porquerías para comer en la universidad me reencontré con las Quesabritas. Do babes... me empaché después de 6 bolsas de pinches Quesabritas. Las comí con tanto gusto que me valió madres terminar como puerco en una escalera sin poder moverme y con los dedos pintados de naranja después de tanto pinche colorante artificial. Buen recuerdo.

Hoy me reencontré con las Pizzerolas. Do babes, que cosa tan chingona. El diseño de la bolsa es como el original, hasta foto le tomé...


Reencontrarse con cosas del pasado es glorioso. Si, ya sé que estoy hablando de pinches frituras pero la neta a mi si me genera un gusto increíble el poder tomar, comer, probar, sentir, vivir, con algo que de pronto desapareció de mi vida y de forma abrupta e inesperada regresa a mi, providencialmente (jajajaja si, ya me la super arranque).

Hoy tambien perdí una parte del pasado y no hay nada que pueda hacer o que quiera decir al respecto, así que a generar futuro con el presente.

Y chínguense unas Pizzerolas en pos de la nostalgia.