MTV LA 18.10.07 / Buen espectáculo.

Pues si, el día de ayer me lanzé a Los Premios MTV.

Fue una odisea interminable entre recoger el boleto, correr al Palacio, formarme entre hordas de fans pubertos y caminar bajo la lluvia... y creánme que valió la pena.

Ólvidense de Belinda, Paulina Rubio, RBD, la hija de Maradonna y el resto de remedos de entretenedores que desfilaron por el Palacio de los Deportes el día de ayer. Son parte del gusto popular y donde manda capitán hay que chingarse...

El evento fue un gran display de precisión en el que era evidente una producción impecable y una organización casi perfecta... siempre existen pequeños detalles que le roban la gloria al equipo de producción, sin embargo, en este caso lidiaron con los problemas técnicos y pudieron resolver todo sin grandes repercusiones.

De The Cure, que les puedo decir, la gordita del dark (si, Robert Smith) vive en mis recuerdos infantiles y adolescentes y es pieza importante de mi soundtrack adulto.

30 Seconds to Mars enriquecido con la expresiva voz de Ely Guerra (que mujer tan talentosa). Digan lo que digan, la banda es muy buena (más allá de la cara de niña de Jared Leto, es un güey talentoso), en fin ya los veremos en vivo en la cd. de México el 26 de Octubre con un foro y una audiencia exclusiva para su material.

Ganaron los Babasónicos, llevaban años de nominaciones y nada de nada, hasta ayer.

Que agradable resultó Diego Luna como locutor, echa buena carrilla el muchacho. Ameno, espontáneo y cagado su estilo...

Magnifica la escenografía y el layout de los escenarios que hicieron super dinámica la presentación de las bandas (y las otras cosas como Kudai que tambien se pararon a "cantar", bueno una de las chicas si canta, el resto mmmm "canta").

Alex Lora como voz en off en las cortinillas fue una excelente opción. Lo quieran o no, el sr. Lora (si me leyera seguro me mienta la madre por formal) es un ícono de la escena musical mexicana (nótese que no dije buen músico, pero nadie le puede negar su papel protagónico en la historia del rock nacional), además también es muy cagado.

Me divertí, recordé lo agradable que era ver el desarrollo de un programa en vivo (cuando se hacen bien las cosas), me di cuenta de la complejidad de este monstruoso (por las dimensiones) evento y disfruté observando los contrastes, anonadado por los fans del infierno, divertido con los adolescentes con ínfulas de adultos, sorprendido por los adultos con tendencias adolescentes y en general regodeandome en el carnaval humano que se dió cita en un Palacio que por un día se transformó en circo de rockeros, poperos y bestias en general.

Y pues honor a quien honor merece. Muchas gracias María Esther (Mas'ter con cariño) por haberme dado la oportunidad de ver de cerca tu trabajo. Fue una experiencia sumamente interesante y completamente fuera de mi rutina y mi esquema. Gracias por romper la rutina, por acordarte de mí y por todas tus atenciones. Groovy como siempre...